lunes, 19 de noviembre de 2012

Calles que firman la paz.

Pasar incontables veces por un lugar cualquiera sin saber que podrá significar en un futuro; lo especial que acabará siendo para ti. Y puede que para alguien más.



Sin saber tampoco lo especial que llegará a ser ese alguien. El papel que tendrá en tu vida. Cuando crees que será extra y acaba siendo tu co-protagonista. ¿Sabéis? Es un sentimiento alucinante.

Es el chico.


El que con magia en sus labios cura tus heridas; con magia en sus dedos te desdúda.
Ni siquiera te das cuenta..cuando pasa,ya ha pasado.
Cuando te planteas dejarle entrar,ya ha entrado.


Y el vacío no te parece tan vació; tan hondo.
Tan oscuro y eterno.

Por que es el chico.

El de los polvos contra la pared,el de las cenas a la luz de las farolas, el que besa como un crío pero huele a hombre.

El que te cambia por dentro,por fuera..sin que quieras cambiar,ya has cambiado. 
Nunca me ha gustado el frío,los inviernos eran largos, veía el regreso demasiado lejos..y ahora si me gusta es porque puedo acurrucarme a él y no envidiar el calor del verano.

Dios..¿no es gracioso? 
Viene sin nada,y se va con tu todo.

Pero,¿cómo evitarlo? ¿cómo controlar las ganas de quererle? 
"No lo hagas,recuerda que paso la última vez.." susurra alguien de la última fila.Casi ni se le oye, nadie lo hace,pero tu sabes quien habla.

Es el miedo. 
Es el agujero de tu pecho recién sanado que te ruega un poco de tregua. 
"Esto no es la guerra..estamos firmando la paz" le contestas,sin siquiera reconocerte a ti misma.

Algo que nunca habrías dicho,algo que en condiciones normales te haría gracia..

Pero es el chico. 

Es el tratado de paz, es su voz prometiéndote que contestará al teléfono,que te abrazará bajo la lluvia y que será tan temerario como tu quieras ser.

Es el chico que se tumbaría en medio de la carretera contigo sin importarle nada más que lo preciosa que estás mojada por la lluvia.

Es..es el chico.

viernes, 16 de noviembre de 2012

Sentimientos que no se van de casa.





Llego a la puerta y no se si quiero entrar,o si puedo.
No encuentro la llave,no encuentro la luz,no me encuentro a mí misma..


Abro la puerta y camino hasta el salón,dejando caer mis zapatos al suelo. Encontrándose con mis lágrimas que no quieren cesar.
Y yo solo puedo preguntar,con mi último hilo de voz; ¿Dónde estás? ¿Dónde estamos? ¿Por que nos hemos hecho esto?

Dímelo,como quieras pero dímelo.

Grítalo,cuéntaselo al viento y reza para que me llegue.
Te he escrito tantas veces sin mandar nada en el sobre,sin más sello que mis labios manchados de ese carmín que tanto te gusta.

¿Sabes? He dejado de mentirme,porque dicen que la mentira y el olvido son completamente incompatibles. Pero casi lo prefería.
Este dolor está arrasando como un tsunami. Este dolor está absorbiendo todo lo que tengo. ¿Por que dejas que eso pase? ¿Por qué nosotros?

Aunque ahora que lo pienso,el dolor es proporcional al amor que nos tuvimos. A las miradas que no supe apreciar,a los dolores de cabeza por los que no me disculpé.


A cada beso en el que escondíamos la más pura de las pasiones.


Caigo de rodillas desprendiéndome de todo lo que no tiene que ver contigo.
Cierro los ojos para verte,para sentir tus manos una vez más,antes de que se desvanezcan los recuerdos.
Creo que alguien me levanta,pero ya me da igual..

Hay algo que me hace sentir mejor,que me reconforta de la más extraña de las maneras.
Sé que estás aquí.
Puedo verte en cada lágrima,en cada escalofrío y en cada pinchazo.

Las mariposas murieron,la magia se la llevó el fuego,y mi corazón..mi corazón siente tantas cosas que está asustado.
Casi tanto como lo estoy yo. Quizá más.

Ahora entiendo porque siempre decías que era una pequeñina,aunque ese momento fue el único en el que me sentí verdaderamente grande.

jueves, 1 de noviembre de 2012

Mentiroso compulsivo.

¿Por qué mentimos? O mejor dicho, ¿A quién?


Ese momento en el que sonríes y le confiesas algo a alguien,suena una campana dentro de ti que te recuerda,que lo que dices no es cierto.
¿Crees que la vida de la otra persona cambiaría si le dijeras la verdad? ¿Es a ella a quien mientes,o es a ti mismo?

Pensémoslo ,a la gente le importa una mierda si somos sinceros o no. Entonces,¿por qué seguir mintiendo?
Os diré por qué; si los demás creen que nuestra vida es perfecta,para nosotros es más fácil creerlo también. 
Vamos..todos decimos que es mejor saber la verdad aunque duela,pero a la hora de llevarlo a cabo,todos nos meamos en los pantalones y nos escondemos detrás de una gran bola de mentiras.

Es cierto que es más fácil hacerse el loco y guardar el dolor en cajitas de un grosor incalculable,pero en el fondo sabes que esa felicidad..es falsa.
Que cada sonrisa que esbozas y la calidez de tu pecho,solo son simples ilusiones que tu mismo creas.

Dicen que está en la naturaleza del ser humado huir del dolor,pero también lo está el saber crecerse ante las adversidades.
Somos tan contradictorios que no sabemos como hacerlo sin acabar en un bar o llorando por las esquinas.

Al fin y al cabo somos así,y seguiremos odiando nuestra capacidad de amar y sentir. Seguiremos huyendo de lo amargo,seguiremos autodestruyéndonos hasta que solo quede el dolor que un día escondimos y una felicidad que nunca fue cierta.